
Aunque para muchos el anuncio de Zuckerberg recordó a Steve Jobs, terminó siendo más cercano a algo que Elon Musk haría, crear especulación a base de una propuesta y no un tangible como lo hacía el líder de Apple. En lo que sí podemos familiarizar a Zuckerberg con Jobs es que ambos proponen para hacer girar al mundo, pues la propuesta de Zuckerberg ha hecho que todas y todos pongamos atención a la realidad aumentada y dicho sea de paso, muchas empresas han aprovechado los reflectores para anunciar sus planes en torno al Metaverso o la vida virtual.
Sin duda, el Metaverso de Facebook es una extensión de su modelo de negocios con base en los datos personales para vender publicidad. “Los anuncios seguirán siendo una parte importante de la estrategia en la parte de medios sociales de lo que hacemos, y probablemente también seguirán siendo una parte significativa del Metaverso”, admitió Zuckerberg.
¿Cuál es nuestro lugar como publicistas y mercadólogos en el Metaverso?
Hasta el momento el panorama no es claro, pero la especulación es infinita, tal vez nada alejado de lo que hemos visto en más de una historia de ciencia ficción. De entrada podríamos declarar que las herramientas como vallas publicitarias y carteles cambiarán de forma, pasarán del 2D al 3D. Sin embargo, si bien estas herramientas “simples” nos exigirán nuevas habilidades, quedarnos en ellas sería poco como creadores de contenido.
Tras el anuncio de Meta, Facebook declaró que invertirá 150 MDD en las compañías Spark AR y AR Effects, ambas propiedad del gigante de las redes y encargadas de desarrollar tecnología de realidad aumentada como filtros, efectos entre otras aplicaciones. La finalidad de esta inversión es el desarrollo de experiencias inmersivas, lúdicas, de desarrollo, de trabajo, etc. etc. Marco Casarín, director general de Meta en México, dijo en una entrevista a Expansión que todo este esfuerzo es para desarrollar la creatividad de las comunidades con tecnología pues prevén que esta será la manera de interactuar en 5 o 10 años.
Este apoyo hace claro de qué lado de la balanza estará Meta, que si bien nos emociona, también nos hace pensar en las futuras restricciones que tendrá la red al momento de crear publicidad o la manera en la que actuará el algoritmo para posicionar nuestros anuncios.
Las experiencias inmersivas no serán el único medio en el que las marcas se harán presente, después del anuncio de meta, la firma de diseño Gucci anunció su colaboración con Roblox para desarrollar productos digitales, otras compañías como Coca-Cola también han mencionado que harán lo mismo. Estas acciones no son nuevas, la venta de productos digitales ha demostrado su rentabilidad, tal es el caso de Nike que para el lanzamiento de los Air Max 720 realizó una experiencia inmersiva una tienda virtual de artículos exclusivos; Otro caso de éxito sería el de Epic Games que generó nueve mil millones en dos años con la venta ropa y máscaras para personalizar los avatares de los personajes.
Cómo entrar a un mundo que aún no existe
En los ejemplos anteriores apreciamos que ya existe una “matrix” pero ha estada cerrada a audiencias específicas, la propuesta de Zuckerberg es abrir este universo a todo mundo y para estar listo se deben de hacer dos cosas plantearnos las siguientes preguntas:
- ¿Cuáles son las fortalezas de nuestra marca en un mundo virtual?
- ¿Cuáles son las debilidades de nuestra marca en un mundo virtual?
- ¿Nuestra marca tiene oportunidades en un mundo virtual?
- ¿Nuestra marca está amenazada por un mundo virtual?
Una vez sepamos el valor que nuestra marca puede aportar al mundo virtual, no necesitamos esperar a que este comience, los medios ya existen y a mayor o menor medida están al alcance. Podemos comenzar a desarrollar experiencias con realidad aumentada o realidad virtual, generar productos para ntfs etc. etc. Las reglas aún no están establecidas y como cualquier novedad será necesario invertir e investigar en el desarrollo de su aplicación. No hay que tener miedo al error, de momento todos gateamos en el tema, solo nos queda prepararnos para que cuando llegue el momento, comencemos a caminar.